Esta construcción está situada en un pueblo de la costa este de la península de Jutlandia (Dinamarca). Se trata de una casita escandinava que tan solo tiene una superficie interior de 24m2. El espacio está muy bien aprovechado, tanto como en la pequeña vivienda BRV1, solo que aquí se le ha aplicado el plus típico del diseño danés.
Casita escandinava
Esta casa posee un revestimiento exterior que es muy común en los países nórdicos: tableros de madera teñida de negro. Pero en esta ocasión se le quiso dar un toque de distinción, añadiéndole unos pequeños anclajes de acero inoxidable. El efecto es similar al de unas costuras en unos pantalones vaqueros de color negro.
La fachada de vidrio está protegida del sol estival, mediante unos aleros, al igual que la entrada a la casa. Pero en el resto de fachadas no fue necesario incorporar ninguna protección. Dentro encontramos lo que cabía esperar, una habitación multifuncional con sitio para comer, preparar comida, y relajarse. Hay un cuarto de baño con ducha, inodoro y lavabo, y justo encima un altillo con la cama para dormir. La altura libre de este loft no debe dar muchos problemas a la mayoría de la gente. Por cierto, que se accede a él por una escalerilla de madera, que tiene peldaños alternados para subir más cómodamente.
Estamos ante una pequeña casa escandinava, y la decoración responde fielmente a ese estilo. Tiene suelo de tablones de madera roble, que se han llevado hasta la pared del fondo. Esta solución crea un buen contraste con los listones del techo y las paredes blancas de los extremos. Es cierto que hemos visto casas diminutas (más pequeñas) con cocina mejor equipada, pero esta casita puede funcionar perfectamente para unas vacaciones.
Cuando vimos esta casita escandinava aquí, estaba a la venta por unos 65.217€. Este elegante edifico lo construyó Faerch & Co.