Decorar Casas
Para decorar casas modernas hay que partir desde lo más esencial. No es lo mismo decorar una casa nueva, desde cero, que decorar la casa en la que llevamos años viviendo. En el primer caso puede que tengamos un presupuesto para nuevo mobiliario y decoración. O puede que nos veamos obligados a utilizar la mayoría de muebles y objetos que ya teníamos. Algo parecido ocurre cuando nos mudamos a una casa nueva, que utilizamos gran cantidad de muebles del hogar anterior. Aquí hay que tener en cuenta que puede que no todo el mobiliario nos sirva, a menos que seamos unos expertos en crear un buen estilo ecléctico.
Las fotos que añadimos a esta página tienen que ver con decoraciones de casas modernas. (Haciendo clic en ellas se obtiene más información sobre ese proyecto decorativo).
Estrategia decorativa según presupuesto
Dependiendo del presupuesto que tengamos, así abarcará nuestra decoración. Por eso la estrategia deberá ser diferente. Con poco dinero será posible mejorar la decoración de nuestro moderno hogar. Pero para resultados más ambiciosos, habrá que recurrir a un presupuesto más holgado. Con artículos y complementos sencillos será posible alcanzar una decoración low-cost. Y para un resultado más impactante necesitaremos también muebles nuevos, entonces decorar la casa costará más.
Tácticas para decorar viviendas
Hay muchas estrategias decorativas que pueden aplicarse según el presupuesto disponible. Aquí hay algunas ideas:
- Comprar elementos decorativos asequibles. Las tiendas de segunda mano y los descuentos son una mina de oro para encontrar adornos económicos. Además, los artículos de decoración de temporada suelen tener precios reducidos una vez que la temporada ha pasado.
- Reutilizar lo que se tiene. Darle un nuevo uso a los muebles y objetos existentes es una forma asequible de actualizar la decoración del hogar. Por ejemplo, aplicar un nuevo acabado a los muebles antiguos, o convertir cajas de madera en estanterías.
- Invertir en piezas clave. En lugar de gastar en muchos elementos decorativos pequeños, se puede invertir en una o dos piezas importantes. Estos elementos pueden tener un impacto visual significativo en la habitación, por eso es una forma inteligente de decorar. Esto puede ser una obra de arte grande, una alfombra llamativa, o un sofá impactante.
- Hazlo tú mismo. Hay muchos proyectos de bricolaje que se pueden hacer en casa, como fabricar tus propios marcos de cuadros o cortinas. Esto no solo ahorrará dinero, sino que también permitirá personalizar la decoración.
- Pintar. La pintura es una forma económica y efectiva de renovar la decoración de una habitación. Por eso hay que considerar darle un nuevo aspecto a las paredes, muebles, o accesorios con una nueva capa de pintura.
Conviene recordar que la clave para decorar con inteligencia es ser creativo, y hacer un uso astuto de los recursos disponibles.
Elementos decorativos principales y secundarios
Este apartado está relacionado con el anterior, pues estrategias decorativas más caras precisarán de elementos decorativos principales completamente nuevos o renovados. Los presupuestos más limitados estarán encaminados a decorar con elementos de segundo orden, más pequeños y baratos.
Los elementos decorativos son objetos, formas, colores, y texturas que se utilizan para embellecer y adornar un espacio. Pueden ser tanto principales como secundarios, y cada uno tiene un papel importante en la creación de una decoración coherente y armoniosa. A continuación, se describen los elementos decorativos principales y secundarios más comunes.
Elementos decorativos principales
Muebles. Los muebles son una parte esencial de cualquier decoración. Se pueden utilizar para definir el estilo de un espacio y proporcionar funcionalidad y comodidad.
Iluminación. La iluminación es un elemento decorativo importante que puede afectar al ambiente de un espacio. Las lámparas, candelabros, y luces empotradas pueden utilizarse para iluminar y resaltar áreas específicas.
Textiles. Los textiles, como alfombras, cortinas, cojines, y tapices, pueden utilizarse para aportar color y textura a una habitación. También pueden ser una manera fácil de cambiar el aspecto de una habitación sin hacer grandes cambios.
Arte y objetos decorativos. El arte y los objetos decorativos, como esculturas, cuadros, espejos, y jarrones, son elementos clave para personalizar y dar carácter a un espacio. Ayudan a añadir color y textura a una habitación, y pueden aportar un toque de sofisticación.
Elementos decorativos secundarios
Plantas. Las plantas son una forma fácil y económica de añadir color y vida a un espacio. Además pueden purificar el aire y aportar una sensación de tranquilidad y armonía.
Accesorios de mesa. Los accesorios de mesa, como jarrones, velas, portarretratos, y cajas decorativas, pueden ser una manera fácil de añadir detalles a un espacio. También pueden proporcionar un toque personal y único a una habitación.
Tapices. Los tapices se emplean para aportar color y textura a una pared. También pueden utilizarse para tapar manchas e imperfecciones en las paredes.
Alfombras. Las alfombras son otra forma de añadir color y textura a un espacio. Ayudan a definir áreas específicas, y añaden calidez y comodidad.
En general, tanto los elementos decorativos principales como los secundarios son importantes para crear una decoración armoniosa y equilibrada. Cada elemento puede aportar su propio estilo y personalidad a una habitación y hacer que se sienta acogedora y atractiva.
Definir bien un estilo decorativo
Para crear una decoración coherente y armoniosa para una casa moderna, es esencial definir bien un estilo decorativo. Para hacerlo, se pueden seguir los siguientes pasos:
Investigar
Lo primero es investigar diferentes estilos decorativos. Se puede recurrir a revistas de decoración, blogs, redes sociales, y libros de diseño de interiores. Con esos recursos tendremos una idea de las diferentes opciones que existen.
Buscar inspiración
Una vez se ha investigado diferentes estilos decorativos, buscar inspiración en imágenes de espacios decorados con esos estilos. Se puede crear una carpeta en línea o en papel con imágenes que nos gusten. Pinterest puede servirnos muy bien.
Identificar las preferencias
Después de haber encontrado varias imágenes inspiradoras, identificar qué elementos nos gustan más de cada estilo. Luego hay que hacer una lista de colores, texturas, patrones, y materiales que nos llamen la atención.
Seleccionar un estilo
Con toda la información reunida, seleccionar un estilo decorativo que refleje nuestras preferencias. Hay que asegurarse que el estilo sea coherente con el espacio que vamos a decorar. Y que sea apropiado para nuestras necesidades y personalidad.
Definir las características
Una vez que hemos seleccionado un estilo decorativo, definir las características específicas que lo definen. Por ejemplo, si elegimos el estilo escandinavo, las características pueden incluir colores claros y neutros, líneas limpias y simples, y materiales naturales como la madera y el lino.
Crear una paleta de colores
Una vez que hemos definido las características del estilo, crear una paleta de colores que refleje el estilo que hemos elegido. Utilizar colores que sean coherentes con el estilo y que complementen los elementos decorativos principales que planeamos utilizar.
Hacer una lista de elementos decorativos
Finalmente, hacer una lista de los elementos decorativos que vamos utilizar en el espacio. Todos los elementos deben ser coherentes con el estilo elegido, y deben complementarse entre sí.
Siguiendo estos pasos, se puede definir bien un estilo decorativo que refleje nuestros gustos y estilo de vida. De esa manera se crea una decoración coherente y hermosa en cualquier espacio. Recuerda que la consistencia en los elementos y la coherencia en los colores y materiales son esenciales para conseguir el efecto deseado.
La importancia del color
El color es una herramienta crucial en la decoración de casas modernas. Sus efectos pueden ser poderosos, ya que no solo afectan nuestra percepción visual, sino también nuestras emociones y estado de ánimo. Por lo tanto, es fundamental seleccionar la paleta de colores adecuada para lograr un ambiente atractivo y acogedor en nuestro hogar.
Percepción del tamaño
La utilización de colores en la decoración de interiores puede influir en la percepción del tamaño y la forma de una habitación. Los colores claros, como el blanco, beige o gris claro, pueden hacer que una habitación parezca más amplia y luminosa. En cambio los colores oscuros, como el azul marino o gris oscuro, pueden crear una sensación de confort y dar la impresión de que la habitación es más pequeña.
Afecta a las emociones
Pero el color también tiene la capacidad de influir en nuestras emociones y estados de ánimo. Los tonos cálidos, como el rojo, amarillo y naranja, pueden transmitir una sensación de energía y vitalidad. Pero los tonos fríos y relajantes, como el azul, verde, y violeta, pueden brindar una sensación de calma y tranquilidad.
Es importante recordar que el color no solo se aplica a las paredes, sino también a muebles, cortinas,… y otros accesorios decorativos. La selección de colores para estos elementos puede tener un impacto significativo en el estilo general de la habitación. Por ejemplo, si se desea crear una sensación de frescura y luminosidad en una habitación, se pueden utilizar muebles y accesorios en tonos claros y brillantes como el blanco, amarillo, o turquesa.
Por otro lado, para crear un ambiente más cálido y acogedor, se pueden elegir colores más oscuros, como el marrón, rojo o verde oscuro.
Además, la combinación de diferentes tonalidades puede ser una forma efectiva de utilizar el color en la decoración de interiores. La combinación adecuada de colores puede crear una sensación de equilibrio y armonía en una habitación. Por ejemplo, la combinación de tonos azules y verdes puede crear una sensación de frescura y relajación. Y la combinación de tonos rojos y naranjas puede transmitir una sensación de energía y vitalidad.
¿Qué pasa con los muebles?
Decorar una casa requiere atención minuciosa a cada detalle para crear un ambiente atractivo y acogedor. Entre todos los elementos de decoración, los MUEBLES tienen un papel destacado en el proceso. Además de cumplir una función práctica al proporcionar asientos, almacenamiento, y superficies de trabajo, los muebles también son fundamentales para definir el estilo y la personalidad de una casa.
Al ser una de las mayores inversiones en una vivienda, es crucial elegir los muebles con cuidado. Los de alta calidad y durabilidad no solo son visualmente atractivos, sino que también pueden soportar el uso diario y el desgaste sin necesidad de ser reemplazados con frecuencia.
Los muebles son una excelente manera de expresar el estilo personal de un hogar. Desde modernos y minimalistas hasta rústicos y clásicos, existe una gran variedad de estilos para elegir. Para cada hogar habrá unos muebles que se adapten mejor a las necesidades y gustos. Eso permitirá crear un ambiente verdaderamente único y acogedor.
Cómo afectan al espacio
La elección de los muebles también puede influir en la percepción del espacio. Los muebles grandes y voluminosos pueden hacer que una habitación parezca más pequeña. En cambio los de tamaño más pequeño pueden crear la ilusión de un espacio más grande. Por lo tanto, es importante seleccionar muebles apropiados para el tamaño y forma de cada habitación.
Los muebles pueden ayudar a definir áreas diferentes de una habitación y crear un flujo natural en el espacio. Por ejemplo, en una sala de estar, un sofá y una silla pueden definir un área de asientos. Una mesa de café y una alfombra pueden crear un espacio de conversación. Al elegir muebles que se ajusten a la función y el estilo de cada espacio, se puede lograr una decoración cohesiva y funcional.
Por último, los muebles pueden agregar textura, color y patrón a una habitación, lo que ayuda a crear un ambiente más interesante y dinámico. Las telas suaves y cómodas, como el terciopelo o el lino, pueden añadir textura y calidez a un espacio. En cambio patrones y colores audaces pueden proporcionar energía y vitalidad.
Más ejemplos
Caso Ö
La Casa Ö, en Yalikavak, Bodrum, Turquía, fusiona la piedra local y el hormigón visto en una decoración atemporal. Los «cubos blancos» se integran en la arquitectura regional. Los espacios interiores, desafiando la gravedad, ofrecen una fusión única de luz natural y diseño contemporáneo. Destacan los paneles de pared que se transforman en arte y la escalera-mueble que fusiona funcionalidad y estética. La madera agrega calidez a este lienzo de hormigón pulido. Con una paleta de muebles vintage y modernos, cada elemento cumple una función. La decoración minimalista resalta la belleza de los detalles funcionales, aunque los techos de hormigón carecen de uniformidad.
Green Cube House
La Green Cube House, ubicada en Denver, redefine el concepto de vivienda sostenible combinando elegancia con responsabilidad ambiental. Extendiéndose sobre 177 metros cuadrados distribuidos en tres plantas, esta casa aspira a la certificación LEED Platino mediante el empleo de materiales eco-amigables y energía solar. Además exhibe un diseño interior que prioriza la apertura y la luz. La cocina, con su isla central, y las escaleras de vidrio son puntos focales que demuestran innovación y estilo. Elementos como un jardín vertical y una chimenea de vidrio añaden singularidad, mientras que los acabados en los baños destacan por su diseño único. Todo ello hace de esta casa un ejemplo excepcional de sostenibilidad integrada con modernidad.
Mont Saint-Hilaire
Situada cerca de Mont Saint-Hilaire en Quebec, esta residencia diseñada por Blouin Tardif Architecture ejemplifica la fusión de arquitectura moderna con elementos naturales. La vivienda se caracteriza por su uso de materiales como madera y hormigón pulido, que no solo complementan el entorno montañoso sino que también añaden una dimensión estética al interior. La estructura destaca por una escalera de acero y grandes ventanas que permiten una abundancia de luz natural. Detalles como un escritorio de vidrio en el estudio aportan modernidad sin opacar la simplicidad y elegancia del diseño. Se hace reflejando un balance perfecto entre funcionalidad y estilo decorativo.
Granja en Woodstock
La Granja de Woodstock, ubicada en un idílico paraje de Vermont (EE. UU.) es un ejemplo perfecto de cómo la arquitectura moderna puede disfrazarse de simplicidad rural. Diseñada por Rick Joy Architects, esta propiedad cuenta con una casa unifamiliar y una estructura adicional para huéspedes. Se caracteriza por su combinación de pórticos metálicos y muros de piedra gruesos. Posee un interior de madera que destaca por su mobiliario moderno, grandes lámparas, y una disposición que promueve la fluidez y la conexión con el entorno natural. La Granja de Woodstock es un refugio contemporáneo diseñado para fusionarse con la naturaleza circundante.
Casa en Shunan
La Casa en Shunan, situada en Yamaguchi, Japón, es un destacado ejemplo de arquitectura moderna. Es un proyecto creado por Satoru Inoue, que tiene una buena base sostenible, estética, y funcional. La estructura principal es de madera, donde sus estancias principales disfrutan de buenas vistas a los campos de arroz. Además, el edificio cuenta con espacios a doble altura, tanto interiores como exteriores. La decoración es sencilla, pues es la propia arquitectura, con una buena selección de materiales, la que decora. Los muebles y electrodomésticos se mantiene en una paleta de colores muy clara, con toques de madera natural. La orientación y diseño de la fachada maximizan la eficiencia energética, ofreciendo privacidad y regulación térmica natural.
Shimogamo
La residencia en Shimogamo, Kyoto, presenta una notable dualidad arquitectónica. Exteriormente, destaca por su fachada moderna de vidrio esmerilado, que con su forma curva y su iluminación, parece más una obra de arte contemporánea que una casa. En contraste, el interior es un homenaje a la arquitectura tradicional japonesa, con un diseño que prioriza la calma y la simplicidad. Elementos como madera de bambú y paneles deslizantes dominan el espacio, mientras que altas pantallas aseguran la privacidad del patio. El cuarto de baño con paredes de piedra también refleja la fusión de modernidad con tradición, mostrando cómo ambos estilos pueden integrarse para crear un espacio armonioso y funcional.
Abiko
Situada en Abiko, Japón, esta casa diseñada por Fuse-Atelier para una joven pareja, destaca por su diseño minimalista y estructura de hormigón visto. La vivienda, de 101m², presenta una escalera sin barandilla y está organizada en torno a un salón de doble altura. La luz natural entra a través del frontal acristalado del salón y un patio en la parte alta, eliminando la necesidad de ventanas convencionales. Los espacios cúbicos alterados y voladizos crean un ambiente único y multifacético. El suelo blanco y brillante mejora la iluminación interior. Esta casa es una obra de arte que combina funcionalidad y estética, capturada magistralmente en fotos de Hiroshi Ueda.
LA House
El proyecto LA House, diseñado por Guilherme Torres en Londrina (Brasil) es una obra que destaca por su arquitectura moderna y volúmenes atractivos. La casa, situada en un terreno elevado, utiliza soluciones innovadoras para garantizar la privacidad. Su diseño exterior combina madera cumaru y hormigón. Sin embargo, el interior no logra mantener la coherencia con el estilo minimalista que sugiere el exterior. Los muebles y la decoración elegidos por el propietario, como la pared de «Space Invaders» y el mobiliario oscuro, no están en sintonía con la elegancia de la estructura. Este desajuste entre la arquitectura y la decoración deja una sensación de desconexión entre el atractivo exterior y los espacios interiores.