El misterio de la lámpara Weight of Light
La Weight of Light Lamp es uno de esos diseños que aparecen, generan ruido y luego se desvanecen sin dejar rastro. No hay web oficial, no hay catálogo, apenas un par de reseñas recicladas. Eso ya la convierte en un objeto de culto: la lámpara fantasma que todos comentan, pero casi nadie ha visto.
Su creador, Liao Chan Guan Jing, imaginó un objeto que mezcla estética industrial y participación del usuario. La idea es sencilla: la luz se regula moviendo un peso sobre un tubo. Ingenioso, sí, aunque no falten quienes lo vean más como una broma conceptual que como una solución práctica.
Inspiración Apple en pleno 2010
El acabado de la lámpara recuerda demasiado a Apple para ser casualidad. Hablamos de 2010: todos los MacBook Pro ya se fabricaban en aluminio unibody, con bordes redondeados y ese brillo frío que convirtió al metal en un fetiche tecnológico. La base de la lámpara parece un homenaje descarado a esa estética.
Lo curioso es que no era la única referencia en esa época: iMacs, Mac Minis e incluso algunos accesorios respiraban el mismo ADN metálico. Que un diseñador de iluminación copiara esos gestos visuales solo confirma lo que ya sabemos: Apple marcaba tendencia más allá de la informática.
El peso como control: genialidad o estorbo
Mover un contrapeso para aumentar o reducir la intensidad de la luz suena divertido en un showroom de diseño, pero en la práctica puede ser desesperante. ¿De verdad alguien quiere que su lámpara se incline solo porque subió un peso en la escala?
Este tipo de experimentos recuerdan más a la obsesión del diseño interactivo que a la necesidad real del usuario. Si buscamos una lámpara funcional, hay mejores opciones entre las lámparas de mesa modernas, donde la estética no sacrifica la comodidad. Un mejor ejemplo de lámpara minimalista es Drawing, que sí incorpora tecnología LED.

Luz fluorescente o LED: la incógnita pendiente
La fuente luminosa es un tubo. La pregunta es: ¿qué tecnología había en 2010 disponible en ese formato? El LED tubular todavía estaba en pañales, caro y limitado. Lo más probable es que estemos ante un fluorescente en miniatura, con todo lo que eso implica: consumo moderado, encendido menos inmediato y una vida útil decente, pero lejos de la revolución LED.
Ese detalle, junto al mecanismo del peso, explica por qué la Weight of Light se quedó en prototipo y no pasó al mercado masivo. Al final, se convirtió en un ejemplo más de cómo el diseño de autor puede fascinar y desconcertar a la vez, quedando a medio camino entre la genialidad estética y el capricho experimental.